San José, Costa Rica. 14 de octubre de 2021.
Los ojos son maravillosos para cada ser humano, pues nos permiten percibir y actuar en el entorno. Es tan normal y cotidiano el VER, que muchas veces no valoramos cuán importante es, en el día a día, nuestro sentido de la vista y no es sino hasta sentirse en riesgo que, nos damos cuenta, del valor que tiene la vista. Asumimos, algunas veces, que la buena condición de la vista va a estar siempre ahí, constante, en cada momento y lugar, permitiéndonos interactuar con el medio. Percibimos así que nunca faltará, pero… ¿Alguna vez ha pensado que pasaría si usted no pudiera ver?, ¿Cómo sería despertar y no poder ver su cama, sus pies, sus zapatos o, si no pudiera ver por dónde camina. Tampoco, si sus ojos enfermaran cómo manejar la ropa que va a usar, o los alimentos para comer, así como percibir la cara de su familia.
Pensemos en ¿Cómo sería si un día, de repente, se afectara el sentido que le permite autonomía para relacionarse con el mundo? ¿Tendrían que ayudarle a hacer las rutinas diarias?, ¿Alguna vez sería capaz de adaptarse a la pérdida de la visión, si tal situación le ocurriera?. Estas interrogantes, rara vez o nunca, pasan por nuestras mentes pues damos por un hecho que, siempre vamos a contar con una buena visión y por ende, no tomamos suficientes acciones para conservar a nuestros ojos sanos, cuidarlos como merecen, o revisar periódicamente su estado.
Incluso, es posible sentir ardor, irritación, sensación de visión borrosa y lo dejamos pasar. O bien, constatamos que no estamos viendo bien, y posponemos la salud de nuestros ojos para otro momento en el que estemos “menos ocupados” o “con más tiempo”.
Este año 2021 conmemoramos el día mundial de la visión el jueves 21 de octubre, y durante todo el mes, celebramos contar con el sentido de la visión y concientizarnos de que nuestros ojos son órganos de primordial importancia pero expuestos a enfermarse. El sentido de la vista está potencialmente en peligro constante y frente a factores de riesgo que pueden limitar nuestra visión.
Igualmente, conviene estar atentos a enfermedades como la diabetes, la hipertensión, el glaucoma, el ojo seco, el síndrome de cansancio ocular, las cataratas, entre muchas otras, las cuales pueden perjudicar a nuestros ojos y producir daño irreversible.
Desde el nacimiento, hasta la edad adulta pueden surgir enfermedades que afectan la visión, las cuales detectadas a tiempo se logran tratar de manera oportuna e, incluso, se pueden curar. No dejemos para mañana la revisión que puede salvar nuestra visión. cuídese, valore sus ojos, revíselos a tiempo y ante cualquier síntoma es mejor actuar. Seamos conscientes de que lo que no hagamos hoy por nuestra visión, puede traernos consecuencias serias. Acudamos, al menos una vez al año, al oftalmólogo y practiquemos buenos hábitos oculares. Nosotros, los especialistas estamos para cuidarle a usted y a sus ojos.
Dra. Karla Olivia Van Dick Sánchez
Especialista en Oftalmología
Código 15696