Guía de Soluciones de Salud (Blog)
San José, Costa Rica.
Una de las frases más comunes que el Dr. Mauricio Barahona, especialista en Nutriología Clínica del Hospital Clínica Bíblica, escucha en su consultorio es: “¡Doctor, hace cinco años que estoy subiendo de peso!" Esta constatación en cada persona es la razón, enfatiza el Dr. Barahona, para dar ese primer paso de atenderse, donde visitarle y conocer su situación de sobrepeso.
1. El primer paso.
Conviene que el paciente considere su estado de salud y se proponga realizar cambios en su vida. El primer paso será buscar la ayuda integral para bajar de peso, y mantener una gran motivación para aprender nuevos y buenos hábitos para su vida nutricional y actividades cotidianas. Aspirar a una mejor calidad de vida ayudará al paciente y también al acompañamiento de los profesionales a lograr excelencia en los resultados.
2. Pequeñas metas, pequeños esfuerzos.
Lo ideal es establecer metas realistas y disfrutar positivamente el proceso, ya que todas las personas tienen necesidades diferentes, en cuanto a su peso, alimentación y ejercicios. Esto da sentido al acompañamiento de los profesionales para un abordaje personalizado y esencial. Los cambios son paulatinos, de manera que la persona vaya sumando y creciendo en salud.
3. Un cambio a la vez.
Primero se debe enfocar en cambios y conductas de manera consciente. Paso a paso, concretar la meta realizando actividades cotidianas, comiendo de manera razonada, con placer, y no de forma restringida. Esto por cuanto, si el cuerpo siente restricciones, después las reacciones no serían tan buenas. Es por esto que también la información recibida por el paciente es primordial para motivarlo a avanzar. Un cambio a la vez es el tercer paso para volver a un estilo de vida saludable.
4. Me tomo lo que sea.
Antes de visitar a un profesional, muchas personas toman productos como batidos, pastillas, hierbas, entre otros fármacos con el fin de bajar de peso. Esto es un error recurrente, ya que se pone en riesgo la salud física y emocional. Es una solución rápida sin mayores beneficios a largo plazo. Recordemos que la desesperación lleva a las personas a tomar malas decisiones. Los cambios no serán de un día para otro. El mejor tratamiento será el que se diseñe de manera individualizada y se consolide para sostenerse.
5. ¿Solo o acompañado?
Los procesos se manejan de manera individual, sin embargo, el apoyo emocional de sus familiares y allegados es un factor importante y positivo. Aun así, si una persona no cuenta con una red de apoyo, el acompañamiento de un equipo de profesionales es una buena manera para salir adelante con los cambios que la persona quiera realizar en la vida.
6. Acompañamiento profesional.
Recuerde que los profesionales, gracias a su formación y experiencia, son los indicados para dar las mejores guías y tratamientos que el paciente necesite. Es un trabajo interdisciplinario para abarcar la salud física, mental y emocional.
Así, es posible lograr frutos a mayor y efectivo plazo.
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