Las amígdalas son parte del tejido inmunológico que tenemos en nuestro cuerpo y con el cual nacemos, y nos permite generar ese contacto con los microbios del medio ambiente. Así, nuestro sistema inmunológico comienza a fortalecerse de una forma adecuada.
Las amígdalas reciben al virus, lo procesan y le enseñan al sistema inmunológico cómo defenderse de la infección y cómo hacerlo cada vez más eficientemente.
¿Cuándo debo quitarlas?
Sin embargo, hay amígdalas que están enfermas y no cumplen con su función normal. Para eso, en otorrinolaringología, existen tres indicaciones absolutas para tener que retirarlas quirúrgicamente:
Infecciones a repetición: pacientes con infecciones bacterianas que generen problemas directamente en la amígdala: fiebre mayor a 38°C, dolor de garganta aguda, malestar general. Más de 7 infecciones en un solo año, ya es indicación de cirugía. O, bien más de 5 infecciones por año por dos años consecutivos. Asimismo, más de 3 infecciones por año por tres años consecutivos.
Obstrucción de vía respiratoria: se da en pacientes con un aumento importante en el tamaño de las amígdalas. Suele ocurrir con más frecuencia en niños que además presentan apnea del sueño (dejan de respirar mientras duermen), y respiran por la boca.
Tumoraciones de amígdalas tanto benignas como malignas.
“Recordemos que la amigdalitis se da en ambas amígdalas y suele curarse en cuestión de 5 a 7 días con el tratamiento adecuado. Si usted tiene una lesión a nivel de las amígdalas que persiste durante más de 15 días, o un par de meses, claramente no es normal, y conviene chequearse con un especialista”, sugirió el Dr. Carlos Saborío, especialista en Otorrinolaringología del Hospital Clínica Bíblica.
Algunos factores de riesgo que pueden sumar a que una persona sea diagnosticada con cáncer de amígdalas son:
Fumado
Consumir alcohol
Ser mayor de 50 años
Con infecciones por Virus del Papiloma Humano
Mala higiene bucal
Prótesis dental mal ajustada
Otras razones de peso para operar
Una indicación más para retirar las amígdalas vía quirúrgica es la amigdalitis caseosa: puntitos blancos en la amígdala que provocan mal aliento. Muchas veces se confunde con infección, y al tomar distintos antibióticos, no cede.
“Son amígdalas que, si no se retiran, el paciente no se va a curar del problema”, agregó el Dr. Saborío.
Existen diferentes técnicas para retirar las amígdalas como la cirugía en frío, la coblación, y el ligasure.
Para conocer más, puede observar el siguiente webinar organizado por el Hospital Clínica Bíblica: